(Xinhua) — La economía de China mantuvo su ímpetu de recuperación en noviembre, con los principales indicadores fluctuando dentro de un rango razonable, según mostraron el miércoles datos oficiales.
Las ventas al por menor de bienes de consumo registraron en noviembre un aumento interanual del 3,9 por ciento, y la producción industrial en términos del valor agregado reportó una subida interanual del 3,8 por ciento, según datos del Buró Nacional de Estadísticas (NBS, por sus siglas en inglés).
La inversión en activos fijos registró un aumento interanual del 5,2 por ciento interanual en los primeros 11 meses del año, con una aceleración de la inversión en las industrias de alta tecnología, de acuerdo con los datos.
La tasa de desempleo urbano encuestado en China se mantuvo en el 5 por ciento en noviembre, una disminución de 0,2 puntos porcentuales por debajo de la cifra del mismo mes del año pasado.
«La resistencia del desarrollo ha mejorado en forma continua y la actividad económica permanece estable en general», destacó el NBS en un comunicado.
La segunda economía más grande del mundo se enfrenta a la presión de la contracción de la demanda, los shocks de la oferta y el debilitamiento de las expectativas, de acuerdo con la Conferencia Central de Trabajo Económico, una reunión anual que concluyó la semana pasada.
«A pesar de numerosas presiones, los cimientos del desarrollo económico a largo plazo de China no cambiaron», dijo el portavoz de NBS, Fu Linghui, en una conferencia de prensa.
Los datos del miércoles muestran que el «sector real» de la economía registró una sólida expansión. La producción del valor añadido de las principales empresas del sector manufacturero aceleró su crecimiento, mientras que las industrias de alta tecnología experimentaron un rápido crecimiento.
La producción de robots industriales aumentó un 27,9 por ciento interanual, mientras que la producción de vehículos de nueva energía aumentó un 112 por ciento desde hace un año.
«La economía real siguió fortaleciéndose y los cambios positivos han aumentado gradualmente. Sin embargo, también debemos ver que el ambiente internacional se está volviendo más complicado y severo, y el impacto de la COVID-19 al país aún persiste «, dijo Fu.
China continuará implementando políticas fiscales proactivas y políticas monetarias prudentes para un progreso económico estable el próximo año, de acuerdo con la importante conferencia.
A medida que se intensifiquen los ajustes macroeconómicos, surtan efecto las políticas para garantizar la estabilidad de la oferta y de los precios, cobren ímpetu las medidas para aumentar la demanda interna, las expectativas de las empresas se mantendrán estables en general, aseguró Fu.
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