(China.org.cn) — Alrededor del 0,3 % de las tierras agrícolas de otoño no tendrán cosecha tras las recientes inundaciones en la provincia de Henan, una pequeña porción, según el departamento provincial de Agricultura y Asuntos Rurales.
Hasta el viernes, las torrenciales lluvias en la región afectaron 712 000 hectáreas de cultivo, aproximadamente el 9 % del total de otoño en la provincia y provocaron daños en casi 23 000 hectáreas.
Los más perjudicados fueron el maíz y los cacahuetes. Sin embargo, el daño al volumen de producción fue menor debido a que una gran proporción de tierras destinadas al segundo no se inundó, y los campos de maíz necesitaban agua de todos modos antes del período de floración.
«Las crecidas generalmente no perjudican las reservas de grano», apuntó Lin Guofa, director de investigación de una plataforma de comercio electrónico agrícola. «El equipo de drenaje está disponible en dichas áreas».
Sin embargo, los mercados de futuros sí reaccionaron. Los precios del maíz y del maní fluctuaron, con aumentos al inicio de las tormentas debido a los problemas de producción. No obstante, luego bajaron, lo que indica la confianza en el suministro de grano, mostró un análisis de mercado.
El optimismo prevaleció sobre la capacidad de China para enfrentar el impacto de las tormentas. La Oficina Nacional de Estadísticas dijo que la producción de grano este verano roza las 146 millones de toneladas métricas, un incremento del 2,1 % más que el 2020.
Mei Xinyu, del Instituto de Investigación del Ministerio de Comercio, dijo que el país es plenamente capaz de resolver el efecto de las intensas precipitaciones en la provisión de alimentos, así como en los precios de cereales en el mercado interno y la respuesta de emergencia.
Henan es una provincia agrícola importante, con la producción de trigo y maíz entre las más altas de China.
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