(Xinhua) — China está tomando estrictas medidas preventivas para garantizar la seguridad de los estudiantes y que no haya rebrotes de la neumonía COVID-19 a medida que comienzan a reabrir las escuelas del país.
Ante la disminución de los indicadores epidémicos en China, muchos estudiantes en el último año de la secundaria básica y preparatoria (secundaria superior) han regresado a clases.
En la región autónoma de Mongolia Interior, en el norte de China, más de 370.000 alumnos han vuelto a la escuela.
Vestido en su uniforme escolar, Qingel pasó el portal de la Escuela Secundaria No.6 en Hohhot, la capital regional, luego de que le tomaran la temperatura automáticamente. Luego caminó por un carril designado hacia el aula.
«Las vacaciones de invierno súper largas finalmente han terminado», comentó Qingel, de 16 años. «Extraño a mis compañeros de clase y los maestros y anoche perdí algo de sueño».
La región ha hecho los preparativos necesarios para la reapertura de las escuelas para reducir el riesgo de infección, señaló Li Zhanfeng, subdirector del departamento de educación regional.
A más de 1.000 kilómetros de distancia, en la provincia de Jiangsu, en el este de China, los estudiantes de grado 9 y 12 ya regresaron a la escuela para prepararse para los exámenes de ingreso a las escuelas preparatorias y universidades, respectivamente, tras un largo receso de invierno, según el departamento de educación provincial.
Al despedirse del largo receso de invierno, muchos estudiantes de la Escuela Secundaria de Funing hacían fila para los controles de temperatura corporal a una distancia de un metro antes de ingresar a los centros escolares en el distrito de Funing.
Cada aula está bien ventilada y las clases se cierran en un momento diferente para evitar reuniones grupales, explicó Qian Liyong, rector adjunto de la escuela.
En la Escuela No. 38 de Hohhot se colocaron estantes fuera de la puerta de cada salón para proporcionar rociadores de desinfección, botellas térmicas, paños de limpieza y otras necesidades diarias.
La escuela ha dividido los grados finales de la secundaria básica y superior en once y doce clases, respectivamente, con un número promedio de menos de 30 estudiantes en cada salón para evitar el hacinamiento, según Zhao Dawei, miembro de la oficina de asuntos estudiantiles de la escuela.
Normalmente cada clase tiene más de 50 estudiantes.
De acuerdo con Qian, en la Escuela Secundaria de Funing, los estudiantes y los maestros deben usar máscaras y mantener distancias seguras en clase.
Liu Junwen es maestro de matemáticas de la escuela secundaria No.4 de Hohhot. Llegó temprano en la mañana para adquirir suministros médicos y revisar cuidadosamente su material didáctico.
«Después de un descanso tan largo, esperaba con ansias el día de la reapertura de la escuela», expresó Liu.
El profesor indicó que quedan menos de 70 días para que los estudiantes en el tercer año de la educación secundaria superior se preparen para los exámenes finales. Los maestros y estudiantes deben «sincronizarse» tras un mes de enseñanza en línea, añadió.
«Intentaremos compensar algunas deficiencias de la enseñanza en línea a través de las clases presenciales», dijo Liu, y agregó que los estudiantes pueden continuar comunicándose con los maestros a través de plataformas en red luego de concluida la escuela.
SIMULACROS, NÚMEROS DE SERIE Y MAMPARAS DE CRISTAL
Para asegurarse de que todo marche correctamente, los maestros y el personal escolar de toda China han llevado a cabo muchos simulacros, que incluyen tomar la temperatura, desinfección y uso de máscaras.
Las escuelas también han cambiado las prácticas alimenticias de los estudiantes, ya que muchos padres muestran preocupación sobre cómo sus hijos pueden comer de forma segura.
La Escuela Secundaria No.6 en la ciudad de Wuxi, en la provincia oriental de Jiangsu, llevó a cabo varios simulacros, durante los cuales los maestros desempeñaron el papel de estudiantes y simularon múltiples procesos como ingresar a la escuela, asistir a clases, lavarse las manos y cenar.
La escuela ha establecido tres entradas diferenciadas para que los estudiantes de distintos grados midan sus temperaturas. Si la temperatura de un estudiante se encuentra por encima de los valores normales, él o ella será llevado inmediatamente a los médicos en el área de aislamiento.
«Hemos mejorado aún más nuestro plan de trabajo en los simulacros. Por ejemplo, después de que los maestros simularon lavarse las manos antes de comer, descubrimos que podría conducir fácilmente a una conglomeración, por lo que propusimos que los estudiantes se laven las manos en tandas», refirió Zhang Gang, director de la escuela.
En la secundaria superior Xishan de Jiangsu, las mesas de los comedores se han etiquetado con números de serie y cada estudiante puede encontrar su mesa mediante este mecanismo.
La escuela secundaria Meili de Wuxi estableció que el requerimiento de que varias clases cenen en las aulas, mientras que otras utilizan la cafetería donde se instalan mesas con mamparas de separación.
Las escuelas rurales también han establecido rutinas estrictas.
«Tenemos lavaderos para ambos sexos en cada piso donde hay seis aulas, por lo que organizamos tres clases para usar los baños a la vez durante el receso», indicó Qian Liyong, miembro de la Escuela Secundaria de Funing.
UN COMIENZO CON PRECAUCIÓN
Aunque la epidemia está disminuyendo en China, el aumento de los casos mundiales plantea una considerable incertidumbre.
Bajo esta circunstancia, la mayoría de las provincias han reanudado las clases parcialmente y manteniendo la precaución. Entretanto, algunas provincias aún son reacias a la reapertura de los centros docentes.
En la provincia de Jiangsu, los estudiantes de otros grados regresaron a la escuela después del 7 de abril, mientras que los alumnos universitarios regresarían después del 13 de abril.
Los departamentos de control de coronavirus de cada ciudad y universidad de la provincia decidirán la información detallada sobre los días de reapertura.
En la provincia suroccidental de Yunnan, el departamento de educación local decidió posponer los días de reapertura programados de las escuelas, a excepción de los grados finales de la secundaria superior y básica, con el fin de reducir el riesgo de propagación del virus.
Wu Zunyou, investigador del Centro Chino para el Control y la Prevención de Enfermedades, instó a finales de marzo a las escuelas en áreas de bajo riesgo a tomar las medidas necesarias para la prevención de epidemias.
Advirtió en ese sentido que la detección de temperatura corporal anormal y síntomas sospechosos se deben informar a las autoridades de salud de forma inmediata.
Además de controlar la temperatura corporal y los síntomas de los estudiantes, también es necesario prestar mucha atención a su condición psicológica, ya que la mayoría de ellos se enfrentan a la presión de los exámenes de ingreso en un momento tan difícil.
Qi Yaling, maestra de la escuela secundaria de Taizhou de Jiangsu, dijo que los estudiantes deben tener confianza en la situación actual.
«Necesitamos hacer planes de aprendizaje científicos para mantenerse al día con el horario general de enseñanza», dijo Qi. «También hay que mantener una actitud optimista».
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