(Xinhua) — El embajador chino en Estados Unidos, Cui Tiankai, pidió la cooperación entre Beijing y Washington para combatir la pandemia de coronavirus, y dijo que «este es un momento de solidaridad, colaboración y apoyo mutuo».
«Reconozcamos que ha habido conversaciones poco agradables entre nuestras naciones sobre esta enfermedad. Pero este no es el momento de hacer señalamientos. Es un momento de solidaridad, colaboración y apoyo mutuo», escribió Cui en un artículo de opinión en The New York Times.
En el texto, Cui añadió: «Siempre recordaremos que en nuestros días más difíciles, nuestros amigos en muchos lugares, muchos de ellos estadounidenses, muchos de ellos neoyorquinos, nos ofrecieron una mano amiga. Ahora estamos listos para responder a su amabilidad y ayudarlos a pasar al otro lado».
Cui señaló que China está haciendo todo lo posible para apoyar a los países que lo necesitan, incluido Estados Unidos.
«Estamos facilitando la compra por parte del Gobierno de EEUU de equipos de protección personal fabricados en China. De hecho, las fábricas están funcionando a toda máquina para cumplir con los pedidos de suministros médicos del estado de Nueva York y otras partes de Estados Unidos», expresó.
El diplomático abundó en que «los Gobiernos provinciales y municipales de China se apresuran a ayudar a sus estados y ciudades hermanas en Estados Unidos también. Y se han agregado donaciones del sector empresarial del país».
Cui sugirió que China y Estados Unidos hagan esfuerzos conjuntos para derrotar la pandemia.
«China y Estados Unidos deben liderar los esfuerzos internacionales en investigación colaborativa sobre tratamientos y vacunas, y explorar el intercambio de tecnologías farmacéuticas entre las naciones. Necesitamos ayudar a los países con sistemas médicos subdesarrollados y contribuir a una mejor gobernanza de la salud mundial», opinó.
Cui también pidió a las dos economías más grandes del mundo que «mejoren la coordinación de la política macroeconómica para estabilizar los mercados; asegurar el crecimiento y el sustento de las personas; y mantener las cadenas industriales y de suministro globales abiertas, estables y seguras».
Además, el embajador chino advirtió contra avivar el racismo y la xenofobia, así como contra señalar como chivos expiatorios a países o razas en este momento, cuando la solidaridad es esencial.
«Tal acritud no solo socavará la cooperación entre nuestras naciones, sino que también sembrará semillas de sospecha y confrontación que podrían poner a nuestros pueblos, e incluso al mundo, en grave peligro por este virus fugitivo y las consecuencias económicas que está causando», advirtió.
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