El Ministro de Asuntos Exteriores chino, Wang Yi, se ha reunido este lunes en Pekín con sus homólogos de países árabes e islámicos que realizan un viaje de dos días a China para estudiar la forma de promover la distensión del actual conflicto entre Israel y Hamás, informa CGTN.
La delegación visitante incluye a los ministros de la Autoridad Palestina en Cisjordania, Arabia Saudí, Jordania, Egipto e Indonesia, así como al secretario general de la Organización de Cooperación Islámica, recoge AFP.
Durante el acto, Wang Yi declaró que la comunidad internacional debe actuar urgentemente para detener el «desastre humanitario» que se está produciendo en Gaza. «La situación en Gaza afecta a todos los países del mundo, cuestionando el sentido humano del bien y del mal», afirmó. «La comunidad internacional debe actuar con urgencia, tomando medidas eficaces para evitar que esta tragedia se extienda«, añadió.
Además, el diplomático señaló que Pekín es «un buen amigo y hermano de los países árabes y musulmanes». «Siempre hemos defendido con firmeza los derechos e intereses legítimos de los países árabes y musulmanes, y siempre hemos apoyado con firmeza los esfuerzos del pueblo palestino por restaurar sus derechos e intereses nacionales legítimos», aseveró. «China defiende firmemente la justicia y la equidad en este conflicto», recalcó Wang.
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