(China.org.cn) — Una mayor cooperación entre China y Estados Unidos en tecnología es la clave para estabilizar las cadenas industriales y de suministro mundiales, e impulsar la recuperación de la economía global en medio de desafíos, llámense una pobre inversión y débil demanda, dijeron ejecutivos de empresas y expertos.
Tras subrayar que el «desacoplamiento» provocado por las tensiones geopolíticas supone un gran riesgo para la estabilidad económica mundial, afirmaron que China tiene un gran atractivo para las firmas tecnológicas estadounidenses ya que el país cuenta con un completo sistema de apoyo a la cadena de suministro, un sólido sistema logístico, un enorme mercado y políticas gubernamentales favorables que estimulan la innovación.
Los comentarios llegan en un momento en que las relaciones bilaterales se estrechan gradualmente, lo que unido a más esfuerzos, podría allanar el camino para un mayor acercamiento en economía digital, fabricación avanzada y tecnologías sanitarias y de bajas emisiones de carbono.
Frank Meng, presidente de Qualcomm China, dijo que el peso pesado estadounidense del chip ve enormes oportunidades en asociarse con sus pares chinas en 5G, inteligencia artificial, internet de las cosas y vehículos inteligentes, además destacó su compromiso con el país.
«Qualcomm considera a China como un socio comercial fundamental y un cliente valioso, más allá de un mercado o un eslabón de la cadena de suministro», dijo.
Según Meng, la cooperación con socios chinos ha sido crucial para avanzar en el desarrollo tecnológico e introducir productos en el mercado mundial. «Esto resalta la relevancia de China y de nuestra asociación con sus firmas», acotó.
Wei Jianguo, exviceministro de Comercio, apuntó que es una tendencia irreversible que ambos países entablen una cooperación científica y tecnológica, porque son muy poderosos e influyentes en áreas de alta tecnología.
«China es vital para el rubro tecnológico estadounidense. Nadie puede negar este hecho. Pensemos en la larga lista de directores ejecutivos que han venido este año: Elon Musk de Tesla, Tim Cook de Apple, Pat Gelsinger de Intel y Cristiano Amon de Qualcomm», sostuvo.
Un análisis de Nikkei Asia coincidió con las afirmaciones. El medio de comunicación japonés reveló que China representó una gran cuota de los ingresos de estos cuatro gigantes estadounidenses el año pasado: el 62 % para Qualcomm, el 27 % para Intel, el 22 % para Tesla y el 18 % para Apple.
Cualquier restricción impuesta a sus pares chinos acabará perjudicando los intereses de las empresas estadounidenses y motivará a las primeras a redoblar esfuerzos para lograr avances en el campo, añadió Wei.
Por ejemplo, en medio de las trabas del Gobierno estadounidense, Huawei desarrolló su propio sistema operativo HarmonyOS, que dejará de ser compatible con las aplicaciones del sistema operativo Android de Google.
La empresa de chips de memoria Yangtze Memory Technologies consiguió avances notables en los últimos años pese a los obstáculos. La semana pasada demandó s su homóloga estadounidense Micron Technology por infracción de patentes ante el Tribunal de Distrito del Norte de California.
Kumsal Bayazit, director ejecutivo de la editorial Elsevier en los Países Bajos, propietaria de revistas académicas de primera línea como The Lancet y Cell, señaló que el vínculo bilateral en la investigación sigue siendo sólido a pesar de los rumores sobre una «disociación».
«Estados Unidos y China son los dos mayores productores científicos del mundo. Ambos crean aproximadamente el 20 % de los artículos afines. China es su socio número uno en colaboración internacional y Estados Unidos también lo es de ella”, constató Bayazit.
«Si nos fijamos en el índice de impacto de los artículos que proceden de su colaboración, este es dos veces superior a la media mundial y a los resultados de cada uno por sí solo”, agregó.
Su sólida cooperación en investigación tecnológica también se da en momentos en que China perfecciona su destreza en el campo. Tomemos como ejemplo la inteligencia artificial. Según un informe de la Universidad de Stanford, en 2022 China fue el primero en número de solicitudes de patentes en el área.
Arvind Krishna, director general de IBM, declaró: «Sabemos que la industria china de la IA está prosperando con muchos adelantos. IBM trabaja muy de cerca con las autoridades y clientes chinos para construir un ecosistema de IA abierto y vibrante que garantice al mismo tiempo su uso responsable».
Añadió que la marca sigue «comprometida a contribuir más a la economía digital china mediante la creación conjunta con nuestros pares chinos».
Sally Loh, presidenta de Otis Worldwide Corp China, fabricante estadounidense de ascensores de alta tecnología, manifestó que el país sigue siendo «un mercado fuerte para muchas compañías estadounidenses ya que impulsa la construcción y modernización de infraestructuras».
Otis posee un «sistema completo de cadena de suministro» en China y más del 90 % de ella está aquí, en el mercado chino”, dijo.
«Nos esforzaremos por integrar la tecnología digital en todos los eslabones de la cadena industrial y la de valor de las firmas chinas, (con el fin de) mejorar de forma integral la eficiencia de su producción y el valor de sus productos», añadió.
Qiu Jinwei, director general del fabricante estadounidense de circuitos integrados Texas Instruments en Shenzhen, provincia de Guangdong, anotó que el ramo chino de vehículos eléctricos ha experimentado un crecimiento explosivo y ha generado una gran demanda de inteligencia, digitalización y electrificación en los últimos años, «lo que nos ofrece grandes oportunidades».
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