(China.org.cn) — A raíz del anuncio del Gobierno cubano el viernes de una exención de visados a partir de este mes para los ciudadanos chinos con pasaportes ordinarios, las búsquedas en plataformas chinas de viajes aumentaron un 40 %, además se suma la pronta reanudación de los vuelos directos de China a la isla caribeña.
La noticia llegó de la mano del ministro cubano de Turismo, Juan Carlos García, durante la 42ª Feria Internacional de Turismo de Cuba (FITCuba 2024), en el balneario de Cayo Coco, provincia de Ciego de Ávila.
García señaló además que China será el país invitado de honor del Festival de Turismo Cubano 2025 y que los vuelos directos entre ambos países volverán a operar a partir del 17 de mayo.
Media hora después del anuncio, las búsquedas con palabras clave como hoteles y vuelos cubanos crecieron más de un 40 % en el portal de Ctrip en comparación con el día anterior, informó el domingo la principal agencia de viajes en línea del país. Residentes de Beijing, Shanghai y provincias como Guangdong, Zhejiang, Jiangsu y Fujian mostraron un gran interés en el tema.
Actualmente, no existen vuelos directos entre China y Cuba, pero Air China ha programado uno Beijing-La Habana para el 17 de mayo.
La plataforma de viajes Qunar indicó que el precio actual del boleto de ida ronda los 8200 yuanes (1132 dólares), con dos vuelos semanales, mientras que el de vuelta cuesta unos 5700 yuanes.
En un foro empresarial en Beijing en noviembre de 2023, el primer ministro cubano, Manuel Marrero Cruz, pidió restablecer los vuelos directos entre las capitales lo antes posible para facilitar el comercio y los negocios. Indicó que ambas partes habían acordado impulsar convenios de cooperación integral.
La reanudación de la ruta es clave para promover la cooperación Sur-Sur y avanzar en la colaboración entre China y Cuba, dijo Song Wei, profesor de la Escuela de Relaciones Internacionales y Diplomacia de la Universidad de Estudios Extranjeros de Beijing, el domingo. Agregó que, dado que Cuba enfrenta una mayor fragilidad por su tamaño y condición de país insular en desarrollo, la mejora de la conectividad y el fortalecimiento de su integración en las cadenas de valor mundiales son cruciales para su avance.
El regreso de la ruta aérea facilitará conexiones más sólidas entre Cuba y el mundo exterior, mejorará sus relaciones comerciales y contribuirá a consolidar su base de desarrollo, acotó Song. Asimismo, mitigará el impacto de décadas de embargo estadounidense y reforzará sus lazos económicos con el resto del mundo como oposición a la hegemonía y las sanciones unilaterales.
Dado el efecto de la pandemia de COVID-19, el largo embargo estadounidense, las incertidumbres geopolíticas y el conflicto en curso en Oriente Medio, la situación de la isla es compleja y ha enfrentado múltiples dificultades. Marrero declaró durante su visita a China en noviembre que la principal tarea del Gobierno es fijar objetivos económicos y de desarrollo, y que el sector turístico será una importante fuente de crecimiento. En esa línea, expresó su deseo de una pronta reanudación de vuelos directos en 2024, así como el poder ver un número récord de turistas chinos en la isla tras la misma.
Hasta el 26 de abril, Cuba ha acogido a más de un millón de turistas internacionales este año, según datos del Ministerio de Turismo. El Gobierno espera llegar a los 3,5 millones a fines de 2024.
Debido a factores como la distancia y el coste, Cuba no es un destino popular entre los viajeros chinos. Sin embargo, al igual que países como México y Brasil en América Latina, la isla cuenta con paisajes culturales y naturales únicos, que resultan muy atractivos para el turista chino, apuntó el domingo Qin Jing, director general de Asuntos Públicos del Grupo Ctrip.
Según Song, para países como Cuba, pequeñas islas en desarrollo del Caribe, el turismo es un pilar económico clave. Fortalecer las conexiones aéreas entre China y Cuba puede permitir a los consumidores chinos llegar a la isla con mayor comodidad y fomentar así su desarrollo económico.
La política de exención de visas a partir de mayo puede ayudar a ampliar el consumo chino en Cuba, e impulsar su economía, sostuvo Pan Deng, director del Centro de Derecho de la Región de América Latina y el Caribe de la Universidad China de Ciencias Políticas y Derecho, el domingo.
Pan añadió que China busca ayudar a su par latinoamericano en el rubro de servicios y actividades comerciales a través de iniciativas civiles, y que el impacto positivo de la entrada sin visa radica en facilitar una cooperación económica y comercial más sencilla en los rubros del turismo y los servicios.
Además, la ruta aérea entre ambos países está exenta de visas de tránsito, agregó.
Fuera del vuelo Beijing-Madrid-La Habana, Air China también reanudó el de Beijing- Madrid-Sao Paulo el 28 de abril. Esta ruta, conocida como la más larga del mundo, cubre aproximadamente 17 500 kilómetros, con un tiempo total de viaje de 23 horas y 20 minutos, incluida la escala. En tanto, Aerolíneas del Sur de China lanzó un nuevo servicio desde Shenzhen directo a Ciudad de México, unos 14 147 kilómetros en unas 16 horas, otro de los recorridos más largos del mundo.
Según Song, la reanudación y el lanzamiento de rutas aéreas entre China, Cuba y otros países latinoamericanos reflejan el fortalecimiento de los lazos con América Latina.
La región ha sido considerada tradicionalmente el «patio trasero» de Estados Unidos, que la considera incluida en su esfera de influencia, lo que ha provocado trabas económicas en el desarrollo de sus economías, explicó Song.
Cómo liberarse de la hegemonía económica estadounidense y buscar asociaciones favorables a su propio desarrollo económico, solidificando así su avance político y económico independiente, es particularmente relevante para los países de la región, esa es también la razón por la que esta concede gran importancia al avance de sus vínculos con China, recalcó Song.
Desde principios de 2024, varios países han implementado políticas de exención de visado para turistas chinos, lo que ha fomentado los viajes al exterior de China. Durante las vacaciones de mayo, las reservas de vuelos a destinos sin visado superaron a las de 2019.
Según Qin, con esta política y la inmediata apertura y regreso de vuelos directos desde China a destinos en América Latina como México, Brasil y Cuba, se espera que el tiempo y el costo para los viajeros chinos sea mucho menor y con ello crezca el número de aquellos que se embarquen a conocer la región.
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